viernes, 2 de mayo de 2014
Quién dijo que en el mar la vida es mas sabrosa era todo un sabio. No hay nada como dormir al lado del mar, con tus tablas para agarrar unas olitas, chelas y ya!
Así, justo así suenan mis días perfectos. Los cocos, las palmeras, la arena, la playita, unas olas, muchas olas, cantidad de olas y mucha buena banda alrededor.
Todos unos personajes entrañables, el mesero, le chico de las tablas, el señor de los cocos, el cuidador de la puerta del campamento, los vecinos... todos saben que están ahí con el único objetivo de pasarla bien, relax y a gusto.
No se cuantos años tenía que no hacía esto y creo que ya me da miedo contarlos... pero una de las cosas que me llegó a la mente en estos días es que en estos últimos 4 meses he hecho exactamente todas esas cosas que moría por hacer y que por diferentes circunstancias no había hecho.
Esto es vida y no chingaderas....
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